Autora: Alba Carballal
Páginas: 288
Editorial: Seix Barral
ISBN: 978-8432234644
PVP: 18,00€
(tapa blanda) // 12,99€ (ebook)
Puntuación personal: 3/5
La enigmática
llamada de teléfono que recibe Federico en la piscina municipal de Chamberí y
una extraña oferta de trabajo son el punto de inicio de una aventura
indagatoria protagonizada por un cuarentón con estudios universitarios y sin
perspectiva alguna de futuro. Éste, obligado por las circunstancias a
convertirse en una suerte de espía mercenario, se verá envuelto sin remedio por
una realidad turbia en la que nada es lo que parece, y en la que el odio, la
venganza y la hipocresía terminarán por contagiarlo. Un Madrid contemporáneo y
underground sirve como escenario para una historia en la que los personajes,
todos ellos perdedores a su manera, luchan por sobrevivir en un entorno hostil
y tratan de escapar de su marginalidad, pero terminan por chocarse con
aquello de lo que tratan de huir: con lo que en el fondo son. La ópera prima de
Alba Carballal, que bebe de referentes literarios como Eduardo Mendoza. Juan
Marsé. J. K. Toole. David Foster Wallace o Michel Houellebecq, pero también de
cineastas como Pedro Almodóvar. Álex de la Iglesia. José Luis Cuerda o Woody
Allen, toma el estereotipo del bufón y lo pervierte para transformar una
aparente comedia ligera en un amargo ejercicio de empatía con todos sus
personajes.
Gracias a Babelio he tenido la oportunidad
de leer el debut literario de Alba Carballal. Una novela divertida, sencilla de
leer y con la que se pueden pasar buenos momentos. Ya desde la sinopsis me
llamaba mucho la atención, y a pesar de no ser lo que me esperaba ha resultado
ser una lectura agradable, además de muy interesante.
Con esta primera novela la autora nos
lleva a una realidad muy cercana, ya que nos sitúa en Madrid en la actualidad.
En este escenario nos encontramos un panorama que podemos reconocer fácilmente y
que se nos plantea de forma bastante similar a lo que conocemos, de tal manera
que puedes meterte más en la historia porque son entornos fáciles de reconocer
o imaginar. Esto supone, en mi opinión, una gran ventaja para los lectores y
que se agradece. Pocos autores nacionales se atreven a dar el paso de usar su
ciudad o una ciudad nacional como marco para su historia, aunque cada vez
abundan más las historias que se salen de escenarios típicos.
Y es una pena que no se atrevan a dar este
paso. No hace falta irse lejos para contar buenas historias, como han
demostrado autoras como Eva García Sáenz de Urturi con Vitoria o Dolores
Redondo con el Valle del Batzan.
En el caso de Tres maneras de inducir un coma Alba Carballal presenta desde el
humor al protagonista principal, Federico. Un personaje que, a pesar de que no
ayuda a empatizar en gran medida, hace agradable la lectura. Carballal nos
cuenta la historia sobre todo desde la perspectiva de Federico, llegando en
algunos momentos a ‘romper’ la distancia con el lector, lo que crea una cercanía
con la historia que me ha gustado mucho. Otro personaje a destacar es Natalia, que
a pesar de narrar en pocas ocasiones y de una forma diferente a Federico es muy
relevante en la historia, y me ha encantado su personalidad.
Esto se debe en gran parte a que es un
personaje trans. Pocas historias he leído con personajes así, pero me parece
que Carballal desarrolla muy bien al personaje, creando una buena representación
del colectivo LGBT+. Es un punto a favor para la historia ya que todavía hay
mucho desconocimiento sobre este tema y muy poca representación en los medios y
la literatura que no va dirigida al público juvenil (donde las autoras Iria G.
Parente y Selene M. Pascual han dado grandes pasos en sus libros para
visibilizar estos colectivos).
Este detalle puede parecer una anécdota
más del libro, pero es muy importante porque ayuda a normalizar una realidad
que cada día está más presente en nuestra sociedad, y que hasta ahora la
literatura estaba ignorando o recurriendo a estereotipos que no reflejan de
forma fiel a estos colectivos. Por eso se agradece que poco a poco se apueste
por visibilizarlos en los libros, pero es necesaria una mayor implicación de
los autores y, sobre todo, una documentación exhaustiva para no caer en errores
que creen una falsa imagen. Creo que el futuro de la literatura (está pasando
ya en la juvenil) debería seguir ese camino.
Otro detalle que me ha llamado la atención
de este libro es la forma en la que Carballal ha distribuido los capítulos y el
estilo que tiene. Es muy peculiar, y aunque es cierto que sobre todo al final
hay algunas partes un poco pesadas de leer en ese estilo, ir descubriendo estas
distintas formas de narrar las historias es agradable.
Puede que se trate de un libro que no vaya
a ser del agrado de todos los públicos, pero merece la pena darle una
oportunidad y leerlo, ya sea gracias a una biblioteca, el ebook,… De esta forma
se puede conocer un estilo diferente y una historia crítica y fácil de leer,
que puede hacer que se vean las cosas desde otra perspectiva.
¡Hola!
ResponderEliminarTiene buena pinta, si sabe jugar con los toques de humor puede ser muy interesante. Me lo apunto para la lista de pendientes.
¡Gracias por la reseña!
¡Hola bonita!
ResponderEliminarHe conocido tu blog a través de la iniciativa de twitter, por lo que además de seguirte por allí empiezo a seguir también tu blog :)
Te dejo el mío por aquí por si quieres pasarte también A La Sombra Del Arciano :)
Un saludo, ¡Nos leemos a la sombra!
¡Buenas! Perdón por no responder antes, gracias por avisar, te sigo también. Y muchas gracias ;)
EliminarUn saludo.